¿Tienes una bañera que apenas usas y ocupa demasiado espacio en tu baño? Cambiarla por un plato de ducha es una de las reformas más populares y prácticas que puedes hacer en casa. En esta guía te cuento todo lo que necesitas saber para que este cambio sea sencillo y sin contratiempos.
¿Por qué dar el salto al plato de ducha?
Las razones son muchas: ganarás espacio, reducirás el riesgo de accidentes, ahorrarás agua y modernizarás tu baño. Además, un plato de ducha es más accesible para personas mayores, niños o quienes buscan mayor comodidad en su día a día.

Paso 1: Infórmate sobre los permisos necesarios
Antes de empezar, asegúrate de conocer si necesitas una autorización para realizar esta reforma. Cambiar una bañera por un plato de ducha se suele considerar una obra menor, pero es fundamental consultar las normativas locales.
En la mayoría de los casos:
- No se requiere licencia específica, aunque puede ser necesario comunicar la obra mediante una «declaración responsable».
- Es buena idea contactar al ayuntamiento o consultar su página web para confirmar los trámites necesarios.
🔎 Consejo: Si trabajas con un profesional o empresa de reformas, ellos suelen encargarse de gestionar los permisos, así que asegúrate de preguntar antes de empezar.
Paso 2: Escoge el plato de ducha adecuado
No todos los platos de ducha son iguales, así que piensa bien en tus necesidades antes de elegir:
- Resina o carga mineral: Son antideslizantes, modernos y muy resistentes. Perfectos si buscas diseño y calidad.
- Acrílico: Una opción más económica, aunque menos duradera.
- Cerámicos: Resistentes, pero suelen ser más resbaladizos. Añade una alfombrilla si optas por esta opción.
👉 Tip: Prioriza siempre la seguridad. Un plato de ducha antideslizante puede ahorrarte más de un susto.
Paso 3: Encuentra al profesional adecuado
Aunque pueda parecer sencillo, cambiar una bañera por un plato de ducha requiere experiencia en fontanería y obra. Lo mejor es contratar a un profesional que te asegure un acabado impecable y sin problemas.
🔎 ¿Dónde buscar?
Hay plataformas en línea donde puedes comparar presupuestos, leer opiniones y encontrar al experto que mejor se adapte a tu proyecto. Además en comerciantes de garantías en el sector de reformas como Leroy Merlín puedes hacerte una idea de los costes de materiales, aparte de lo que te cobre el instalador.
💡 Recomendación: Solicita al menos tres presupuestos para comparar precios y asegúrate de que incluyan:
- Materiales (plato, mampara, azulejos si los necesitas).
- Mano de obra.
- Retirada de escombros y limpieza.
- Posibles imprevistos.
Paso 4: Calcula cuánto puede costar
El coste de cambiar una bañera por un plato de ducha puede variar dependiendo de factores como los materiales, el tamaño del baño y las tarifas del profesional.
En general, los precios rondan:
- Entre 800 y 1.500 € para un cambio completo con materiales de calidad media-alta.
🔎 ¿Cómo comparar precios?
Consulta páginas web especializadas donde puedas obtener presupuestos orientativos según el tipo de reforma y los materiales que elijas.
Paso 5: Supervisa la obra y revisa el resultado final
Un cambio de bañera a plato de ducha suele completarse en 1 o 2 días. Una vez finalizado, asegúrate de revisar:
- Que no haya fugas ni problemas de fontanería.
- Que el plato de ducha esté nivelado correctamente.
- Que los acabados, juntas y sellados estén perfectos.
La instalación de un plato de ducha por parte de un fontanero implica varios pasos clave para asegurar una colocación correcta y funcional. Aquí tienes una guía general basada en información disponible en línea:
- Preparación del área:
- Instalación de desagüe:
- Base de mortero o ladrillos:
- Se recomienda crear una base sólida con mortero o ladrillos para que el plato de ducha tenga una adherencia adecuada. Esta base debe estar perfectamente nivelada y seca antes de proceder con la instalación del plato. Algunas fuentes sugieren el uso de una cola de poliuretano como Sikaflex para adherir el plato a la base.
- Colocación del plato:
- Sellado y pruebas:
- Tiempo de secado:
La precisión en cada paso es fundamental para evitar problemas como filtraciones, movimientos del plato o fallos en el drenaje. Para trabajos más complejos o si el fontanero no tiene experiencia específica con platos de ducha de ciertos materiales, como la resina, puede ser beneficioso consultar las guías específicas del fabricante o contratar a un profesional con experiencia en este tipo de instalaciones.
Paso 6: Encuentra al profesional adecuado en tu provincia
En este sencillo buscador puedes seleccionar fontaneros y contratistas expertos en reformas que te van a poder ayudar a cambiar tu bañera por un plato de ducha con garantías profesionales.

Conclusión
Cambiar la bañera por un plato de ducha es una reforma sencilla, pero que transforma por completo tu baño. La clave está en planificar bien, contratar a un buen profesional y elegir materiales de calidad.
¿Listo para modernizar tu baño? Sigue estos pasos y disfruta de un espacio más cómodo, seguro y funcional en pocos días. ¡A por ello!